Revista Ciencias Pedagógicas e Innovación
Volumen VII (julio-diciembre 2019), Nº 1, pp. 86-94
http://dx.doi.org/10.26423/rcpi.v7i1.286
Helen Alexandra Garzón-Borray1 https://orcid.org/0000-0003-1877-2319 Guillermo Meza Salcedo1* https://orcid.org/0000-0001-9707-6519
1Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia * helen.garzon@uniminuto.edu
La Eskina del Barrio es una organización juvenil colombiana que genera a través de la cultura y el arte el fortalecimiento del talento local como una iniciativa para la transformación social. La investigación tuvo como objetivo la re-construcción histórica de esta organización desde su origen como proyecto social, para comprender el impacto que ha generado en los jóvenes que hacen parte de este colectivo, así como en los territorios en los que desarrollan sus actividades. Se utilizó una metodología cualitativa, con un diseño etnográfico que se desarrolló en tres fases: alistamiento, recolección de información y análisis de datos obtenidos. Como resultado se identificaron las estrategias de identidad cultural, la participación, la formación, la construcción de territorio y tejido social que la organización utiliza para generar espacios de transformación social en los entornos que interviene.
Palabras clave: Transformación social, Cultura Urbana, Juventud, Territorio.
The Eskina del Barrio is a Colombian youth organization that generates through culture and art the strengthening of local talent as an initiative for social transformation. This research aimed to build the historical review of the Eskina del Barrio from it is origin as a social project and understand the impact it has generated in the young people who are part of this group, as well as in the territories in which they develop their activities. A qualitative methodology was used, with an ethnographic, the investigation encompassed three phases: enlistment, information gathering, and data analysis obtained. As a result, it was identified that the Eskina del Barrio uses strategies such as cultural identity, participation, training, construction of territory and social fabric, thus achieving spaces of social transformation in the environments that intervenes.
Keywords: Urban culture, social transformation, youth, territory.
Recibido: 20/05/2019; Aceptado: 05/06/2019; Publicado: 26/06/2019
En la actualidad los jóvenes son uno de los principales actores de transformación social en el mundo, quienes a través de estrategias relacionadas con el arte y la cultura desarrollan procesos de innovaciones sociales que generar nuevas narrativas en temas de ciudadanía y derechos humanos, acordes a sus territorios1. En América Latina existen algunas experiencias de transformación social, las cuales utilizando el arte han incidido en las maneras de abordar las políticas culturales y de desarrollo, logrando posicionarse como escuelas de formación de gestores culturales y profesionales que hoy ocupan puestos en las instituciones formativas de los gobiernos2.
Para comprender mejor el desarrollo de los llamados grupos juveniles y sus procesos de participación y transformación social, se requiere abordar conceptos como el de juventud, cultura urbana, identidad de grupo, territorio y transformación social. Por ejemplo, la condición de juventud hace parte de un proceso de construcción sociocultural enmarcado por características históricas, biológicas y culturales que suelen asociarse a sujetos en procesos de construcción de identidad y de expresión de lo juvenil, por lo que sus conductas pueden alterar algunas normas establecidas3,4. Esto, en las últimas décadas, ha generado diferentes discusiones relacionadas con los colectivos juveniles y sus actividades, pues existe el imaginario de que algunas de estas organizaciones promueven ideas de oposición social al statu quo y son vistos como rebeldes sin causa, subversivos, revoltosos, inadaptados.
Sin embargo, la “emergencia de culturas juveniles” es un hecho, pues los grupos de jóvenes se organizan a partir de características comunes e intentan mostrar sus intereses en diferentes formas como prácticas alternativas y resignificantes para la transformación social, influidos por la cultura y el arte. Por tanto, la pertenencia a un grupo puede ser entendida como una herramienta de transformación social que al estar bajo la influencia del arte concibe un pensamiento diferente, capaz de construir una postura social distinta5.
Por otro lado, los procesos de participación juvenil permiten una concepción política, social y de ciudadanía que implica el conocimiento del contexto en el que se está inmerso y la responsabilidad frente a éste. Además, son escenarios para la formación de jóvenes con identidad territorial, con sentido de pertenencia al entorno donde viven, quienes generan propuestas alternativas para un ejercicio de ciudadanía responsable desde apuestas como el arte y la cultura orientadas a la producción social entre personas y organizaciones que contribuya a la generación de condiciones de igualdad, justicia2. En esta perspectiva, la conceptualización de la palabra “territorio” va más allá de una simple división del suelo por medio de límites geográficos, pues el territorio hace referencia también a la cultura, a las historias relatadas por una comunidad, a sus ancestros y muertos, a la construcción de pensamientos y todo lo que implica el simbolismo de habitar una tierra. El sentido de territorio es tan fuerte que, a quién no pertenece a ese contexto se le toma como extranjero o persona ajena a los ‘códigos de reconocimiento’ propios de quienes lo habitan1.
Por otra parte, los conceptos de cultura y de identidad están estrechamente relacionados y aluden a la pertenencia y las características alrededor de un grupo social con quienes se comparten rasgos y afinidades culturales. Aquí se enmarca la definición de “identidad cultural” con una fuerte relación hacia un territorio, la cual plantea la identificación y comunicación en una estructura cultural a partir de elementos como lenguaje, historia, símbolos y comportamientos propios de una comunidad6.
Así pues, en la conformación de grupos juveniles es frecuente encontrar intereses comunes en torno a elementos culturales y artísticos. Según LlamosaEscovar7 estos grupos se hacen visibles en diversos escenarios públicos por medio de expresiones artísticas como el rap, el hip hop, el break dance y el grafiti. Por ejemplo, el hip hop es una expresión de arte definida como un movimiento artístico musical, popular o cultural, pero también como cultura, subcultura o filosofía, debido a que el grupo de personas que están en relación con él tienen una particular forma de vida8. El hip hop es una estrategia artística usada en el área educativa para el acompañamiento de niños y adolescentes en condiciones de vulnerabilidad y de degradación social. No solo puede ser clave en el proceso individual interpersonal y de promoción social, sino que en determinados contextos es el único medio para desarrollarlo9.
La cultura del hip hop propone valores considerados positivos por la sociedad como la colaboración, la creatividad, la comprensión y la expresividad, sin embargo, la imagen que los medios de comunicación trasladan sobre este género, corresponde a un estereotipo negativo y en algunos casos discriminatorio9. A pesar de los calificativos que se dan para esta expresión artística, la investigación de Silva1 que estudia los imaginarios urbanos, reconoce a Colombia como uno de los países de América Latina en el que sin duda se ha explorado más la expresión del grafiti, el cual es considerado como valioso desde su intención comunicativa respecto a la construcción de tejido social frente a la percepción negativa de su prohibición social. Este tipo de arte tiene como fin generar un efecto social de oposición a las normas establecidas a partir de ideologías y simbolismos culturales que logren comunicar pensamientos.
Además de los elementos culturales, los procesos de transformación social pueden ser explicados desde la teoría de la transformación de los sistemas que deben ser flexibles para que se dé un proceso de cambio. La transformación se define como la alteración del equilibrio de un sistema para generar nuevos procesos que cumplan con las necesidades de los miembros del sistema. La transformación social tiene sus bases en la teoría general de los sistemas propuesta por Bertalanffy10, quien afirma que los individuos hacemos parte de una división de sistemas: un sistema -totalidad coherente-, un suprasistema -medio que rodea al sistema- y un subsistema -los componentes del sistema.
Para fortalecer el criterio de transformación social comprendido desde la alteración de los sistemas, es posible generar un marco de discusión frente a los procesos de identidad cultural. Diferentes organizaciones juveniles se consolidan en torno a la identificación de un territorio y proponen alternativas de transformación social y cultural a partir de la lectura que como sistema realizan del contexto en el que están inmersas11. En este punto, la función que ejerce la cultura es determinante para alterar el sistema, pues como se infiere en Martínez12, los sistemas culturales se alteran en la medida en la que no garantizan la conservación de la vida, dando lugar a nuevos imaginarios y acciones colectivas que respondan a las necesidades sentidas por sus actores. Por lo anterior, se plantea la interacción directa entre los procesos de transformación en una sociedad y las construcciones culturales de las mismas, es decir, que no es posible producir un cambio si no se existe un significado claro del contexto que se pretende alterar.
Ahora bien, desde la mirada de la innovación social se puede determinar que el hecho de innovar se refiere a trasformar sucesos u objetos, implantando estrategias novedosas encaminadas a cumplir grandes expectativas dentro del campo social supliendo necesidades dentro de este contexto sin perder siempre un rumbo social13. Además, se puntualizan unas ideas claras dentro del marco de innovación social como que el aspecto novedoso y único siempre debe ir enfocado a lo social para suplir las necesidades y debe generar huella dentro del contexto social14.
La condición de juventud no debe verse como un sujeto homogéneo y etiquetable, por el contrario, debe percibirse como la construcción de actores complejos, creativos y heterogéneos que se agrupan en colectivos en los que se definen, preservan diferentes intereses y se gestan procesos15 16. Dentro de las estrategias culturales de algunos grupos de jóvenes para construir alternativas de cambio para diferentes problemáticas en el entorno, se encuentran expresiones de arte urbano como el grafiti, break dance y la música. A propósito de estos procesos, es relevante desatacar la experiencia de un colectivo juvenil en la ciudad de Ibagué, denominado La Eskina del Barrio (LEB).
LEB es una organización no gubernamental sin ánimo de lucro, que hace once años se originó en los barrios del sur de Ibagué (Colombia) impactando de forma positiva tanto a la comunidad local como a diferentes territorios nacionales donde han compartido su experiencia. Su labor se basa en la generación de cultura y arte urbano, fortaleciendo el talento de los jóvenes para que sean promotores de transformación social frente a las condiciones de vulnerabilidad que vive la población infantil y juvenil en algunos territorios de la ciudad. Violencia, microtráfico, delincuencia, entre otros fenómenos son el desafío que mueve a esta organización a generar espacios de transformación social desde sus propios actores con miras a cambiar las condiciones de vida que se han impuesto por el ambiente en el que se desarrollan. Dichas condiciones no están lejos de la realidad de los jóvenes que con el paso de los años han pertenecido a LEB.
Este trabajo reconstruye y describe el proceso que ha tenido esta organización juvenil en Ibagué y el impacto que ha generado en otros municipios. Muestra su historia y las estrategias de transformación social compartidas en diferentes países, así como las características de liderazgo juvenil que se han gestado dentro de ella. Para cumplir con este cometido se describen los procesos de participación que ha tenido esta organización, sus hechos más relevantes, y, los proyectos y estrategias de innovación social que han implementado para generar acciones de trasformación social en los jóvenes de la ciudad de Ibagué.
La investigación se desarrolló desde un enfoque cualitativo17, con un diseño etnográfico - etnohistórico de corte transversal, en el que se interpretó y analizó la información proveniente del trabajo de campo, cuyas fuentes (verbal y no verbal) consisten en experiencias textuales de los protagonistas de la organización LEB y de la observación realizada en territorio donde se desarrolla su vida para comprender lo que hacen, dicen y piensan sus actores, además de cómo interpretan su mundo y lo que en él acontece18. Para llevar a cabo este proceso, se realizaron visitas a la organización LEB, se revisó documentación perteneciente a eventos en los que han participado, al igual que información adicional que se encuentra en la web acerca de la participación en el territorio y en otras ciudades, así como el impacto social que ha tenido este grupo desde sus inicios.
La pesquisa fue realizada con un grupo de jóvenes pertenecientes a las comunas 11, 12 y 13 de la ciudad de Ibagué y líderes fundadores de la organización LEB. A ellos se aplicaron entrevistas semiestructuradas, cuestionarios de caracterización sociodemográfica y cuestionarios de percepción de la organización. Por tanto, su desarrollo se llevó a cabo en tres fases: la primera fue de alistamiento, en la cual se diseñaron los instrumentos para la recolección de información a partir de entrevistas, la matriz de análisis para la información obtenida, dos cuestionarios de caracterización sociodemográfica de la población y un cuestionario de percepción que se aplicó a la comunidad. La segunda fase, consistió en el trabajo de campo para la recolección de la información en torno al origen y evolución de la organización. Para ello se establecieron dos momentos; en el primero, se recopiló la información a partir de las entrevistas y cuestionarios previamente diseñados a los miembros del grupo, fundadores y comunidad; en el segundo, se hizo una revisión de documentos y archivos existentes en la organización con el fin de categorizarla en torno a su origen, desarrollo y estructura, finalmente se hizo registro de otras fuentes como el internet y otras entidades públicas con las que la organización había tenido algún tipo de vinculación y que pudiera arrojar información pertinente para el proceso de investigación. En la tercera fase, se hizo el análisis de la información recolectada a partir de la sistematización de los datos obtenidos por medio de las encuestas, la entrevista e información adicional.
Para el análisis de resultados se codificó y analizó la información recolectada con el software de análisis cualitativo NNvivo (QSR Internacional, 2015) con la generación de siete categorías principales de análisis, tomadas a partir de la información recolectada por medio de las entrevistas y cuestionario de caracterización. Se utilizó el software NNvivo de análisis cualitativo categorizando la información en siete nodos generales, teniendo en cuenta que se trata de una reseña histórica, estas son: Orígenes (subcategoría, Cultura urbana) – Reconocimiento (subcategoría, Festivales y Eventos) – Ámbito internacional – Territorio - Actualidad – Características del grupo – Transformación social.
A partir de las entrevistas aplicadas y los relatos de los integrantes más antiguos de la LEB se identificaron elementos comunes que explican los procesos y experiencias que han tenido como colectivo, así como las estrategias de participación implementadas para desarrollar su propuesta de transformación social por medio del arte. Estos resultados están precedidos por una breve descripción de algunos aspectos sociodemográficos de la organización.
La organización LEB cuenta con 20 miembros élites, la mayoría son hombres con edades entre los 17 y 32 años. Algunos de sus miembros son fundadores de la iniciativa y otros se han ganado su lugar por el proceso y trabajo desarrollado con el grupo. Estos jóvenes son de estratos socioeconómicos 1 y 2, en su mayoría pertenecientes a las comunas 11, 12 y 13, ubicadas al sur de la ciudad, por lo tanto, aisladas o en la periferia de esta localidad. Además, estas comunas eran consideradas como corredores de delincuencia y espacios de violencia donde los jóvenes eran reclutados por organizaciones delincuenciales para vender sustancias psicoactivas. Sin embargo, algunos integrantes de la organización LEB pertenecen a otras comunas como la 2, la 8 y la 9, quienes a raíz de impacto de las estrategias culturales iniciadas en el sur se han vinculado activamente.
En el aspecto educativo, se ha logrado una etapa de formalización de la educación en la organización, cuentan con 4 profesionales y 4 más han iniciado su proceso de formación universitaria, en el campo de la psicología y la comunicación social. En el ámbito laboral, aproximadamente la mitad del grupo élite se encuentra vinculado como empleados o trabajadores independientes, mientras que los demás integrantes no cuentan con un trabajo estable o realizan otro tipo de actividades. A nivel de estructura familiar, se evidencia en la caracterización que 5 de los 13 participantes tienen hijos. De igual forma, el tipo de vivienda que habitan en su mayoría es propia o familiar, solamente un 28% de los encuestados paga arriendo.
Los aspectos que dan el inicio de esta organización juvenil de acuerdo con las narraciones de sus autores parten de un componente social en un contexto de violencia y delincuencia desarrollado en el sur de Ibagué y que afectaba las condiciones juventud. Según refiere el líder y fundador de la organización, […] a partir del año 1994 y 1995 se empieza hablar desde los barrios populares en otro lenguaje y no hablar simplemente el lenguaje de la violencia, sino un lenguaje artístico en pro de decir muchas cosas que muchas personas no quería decir.
Específicamente ahí es donde nace el proceso que hoy en día conocemos como la Eskina (Entrevista a Mauricio Rodríguez).
El contexto que da origen a la organización, que en un principio simplemente fue una estrategia de grupo juvenil a partir de intereses en común; surge como resistencia a los estereotipos planteados en Colombia, de que las situaciones violentas o delincuenciales generalmente sucedían en las esquinas de los barrios. De manera particular en Ibagué las noticias señalaban los aspectos negativos como procedentes de los barrios del sur de la ciudad.
Los procesos que movilizaron al grupo estuvieron encaminados a mejorar su comunidad, pero en contra de todas las actividades relacionadas con el uso de armas (fuerzas armadas o delincuencia), pues su significado les generaba la percepción de violencia y represión, por lo tanto, deciden trabajar con los “pelados” (jóvenes) temas de proyecto de vida usando como estrategia el arte urbano (rap, break y grafiti). El proyecto inicia entre el 2007 y 2008 en cabeza de Mauricio Rodríguez actual líder.
Así pues, el eje fundamental de las propuestas artísticas de LEB, comprende la cultura urbana como herramienta para convocar y llegar a las comunidades. Inician con hip hop al parque en las comunas de 11, 12 y 13 del sur de Ibagué, llegando a congregar un promedio de 300 a 400 personas, entre niños, adultos, mujeres y ancianos. Esta propuesta artística, ofrece el arte como la posibilidad para encontrar soluciones diferentes al uso de armas o violencia. Propone como alternativa, cantar, hacer dibujo y bailar para plasmar diferentes sentimientos y solucionar conflictos.
Como grupo establecido, LEB genera dinámicas de tejido social para proponer por medio del arte un lenguaje de paz y convivencia, brindando herramientas a los adolescentes y jóvenes en la construcción de un proyecto de vida desde las diferentes estrategias artísticas que implementan tales como break dance, hip hop y el grafiti.
Entonces LEB enseñándole a un niño a bailar break le puede estar enseñando a ser un bailarín, más adelante como una carrera o un rapero o un pintor, hasta un pintor por lo del grafiti y ayuda a desarrollar los talentos que tiene la gente y a que tengan una manera saludable y buena para la sociedad invertir el tiempo (Entrevista a un miembro de la comunidad).
Esta proyección de vida debe estar encaminada a satisfacer las necesidades educativas y de emprendimiento en esas comunidades con las que se desarrolla la propuesta. La estructura de la organización ha llevado a exigir procesos de formalización académica para sus integrantes y han alcanzado alianzas gubernamentales e institucionales para facilitar el acceso de los miembros del grupo a un proceso de educación formal.
Una de las estrategias implementadas por el grupo y la que mayor impacto ha generado, es la creación de semilleros, grupos pequeños que se forman en la comunidad para capacitar en los procesos de cultura urbana y promover que los mismos jóvenes reproduzcan lo aprendido. A partir de estas propuestas han logrado como grupo un estatus en la comunidad y son reconocidos como profesores y no como “los bandidos de la esquina ni los ñeros ni los ladrones”.
LEB se plantea como objetivo, convertirse en un programa de transformación social a través del arte para consolidar un modelo de desarrollo social que contribuya al mejoramiento de la calidad de vida de las personas que viven dentro y fuera de los barrios en situación de pobreza; además de proyectarnos a nivel individual y colectivo recuperando los valores de arte y cultura como motores de la vida social. Los movimientos sociales, el trabajo en red, las experiencias de apoyo mutuo, todas ellas son ejemplos de las nuevas maneras de relacionarnos y de construir que se están generando (Entrevista a un miembro de la comunidad).
Esta categoría relaciona las participaciones a nivel internacional que han destacado los procesos liderados por los jóvenes de la organización, permitiéndoles visibilizarse ante organismos internacionales a partir del trabajo desarrollado en los territorios del sur de Ibagué. Países como Holanda, México, España, Argentina, Costa rica, además de instituciones como Berkly en Estados Unidos, (Universidad más importante de la música), han destacado los procesos implementados por LEB.
Algunos de los eventos más representativos incluyen la socialización de la experiencia del colectivo por parte del director de la organización ante La Haya en Holanda y los procesos de formación para niños en México, que incluyó representaciones culturales del comité de danza (break dance) y la invitación al país vasco en España, para la realización de muestras artísticas y conversatorios de empoderamiento artístico-juvenil en Latinoamérica.
El nacimiento de una propuesta de transformación social liderada por jóvenes para dar solución a problemáticas propias de su territorio se contextualiza en los barrios del sur de Ibagué, catalogados desde los años 1990 y 2000 como sectores de muchas problemáticas sociales. Sumado al foco de violencia por el que pasaba el país, fue creciendo la estigmatización de este sector y de sus habitantes, por lo que se genera en 1994 el escenario propicio para hablar del territorio y de la construcción de este por sus propios actores. Son comunidades que se sienten ajenas a la ciudad a consecuencia de estas dinámicas, por lo que han desarrollado sus propios procesos.
LEB nace inmersa en territorios socialmente excluidos y poco visibles para la ciudad de Ibagué, su trabajo inicia con la comunidad más cercana, pero alcanzan su estatus de reconocimiento hasta que organismos internacionales resaltan su labor, es en este punto donde su trabajo comienza a tomar un valor adicional para el departamento del Tolima y para otros territorios en Colombia.
En los municipios se realizaron las siguientes actividades:
Giras para replicar las escuelas de música.
Campaña para la prevención del suicidio, desarrollada en los municipios y colegios del departamento, con el fin de sensibilizar a la niñez, adolescencia y juventud frente al valor de la vida y las estrategias artísticas que pueden implementar.
Iniciativa “yo decido vivir mi sexualidad con responsabilidad”, en alianza con la gobernación y la secretaria de salud se diseñaron ejecutaron talleres en diferentes municipios.
Respecto a los proyectos se puede enunciar los siguientes:
Proyecto desarrollado con la gobernación para el trabajo en escuelas de arte (baile, pintura y música) con infantes y adolescentes en Florencia, Caquetá.
Proyecto con la gobernación del Meta, para el trabajo en paz y temas de posconflicto.
En conjunto con el ICBF – Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, se desarrollan clubes juveniles en centro para menores ‘Kiwanis’.
Teniendo en cuenta los alcances que ha tenido LEB y las experiencias adquiridas a lo largo de aproximadamente 9 años, se ha implementado una estructura administrativa que les permite desarrollar un proceso autosostenible. Hoy en día se trata de una organización legalmente constituida con sede en la ciudad de Ibagué. Se planteó una estructura jerárquica que define claramente las funciones y los elementos desarrollados al interior de la organización, además de permitir el ingreso de personas externas al proceso que puedan aportar conocimientos y calidad humana al trabajo adelantado por los miembros de LEB.
Los procesos que se vienen adelantando de acuerdo con los ideales de la organización sin ánimo de lucro, están encaminados de la siguiente manera:
Escuelas, área formativa con talleres de hip hop que existen en las comunas y municipios del Tolima. En estas, se brindan modelos de participación no violenta para los jóvenes y dirigido al manejo del tiempo libre con una educación en artes urbanas y sus elementos (Rap, break dance, baile callejero, arte gráfico o grafiti, producción de audio digital, percusión e instrumentación musical y audiovisual, Disc jockey, entre algunos otros).
Música, relacionada con producción de audio digital para artistas de géneros urbanos o alternativos (pistas, grabación, mezclas, masterización, cds, caratulas, prensajes video clips, entre algunos otros).
Comercialización, líneas de emprendimiento para la fabricación y venta de productos (camisetas, posters, manillas, botones, maletines, gorras, vendas, cds, entre algunos otros).
Producción, dirigido a la ejecución de proyectos, conciertos y eventos; incluye planeación, logística requerimientos técnicos y comunicativos entre otros (festivales, conciertos al aire libre, conciertos en bares y discos, producción para música danza, arte gráfico, cine, entre algunas otras). Actualmente el grupo se encuentra adelantando la construcción de la mesa cultural del departamento del Tolima, para poder articular los procesos culturales, deportivos y sociales y generar propuestas con los jóvenes de distintos municipios que puedan ser planteadas en el plan de desarrollo departamental.
En esta categoría se pretende mostrar cómo las estrategias artísticas implementadas por el grupo han modificado el proyecto de vida de muchos jóvenes que ven en el arte y sus expresiones la posibilidad de salir del contexto en el que la sociedad los ha marginalizado. El poder replicar escuelas y compartir experiencias han servido como pilar de construcción para una cultura juvenil de paz y participación comprometida con las problemáticas sociales en que se encuentran inmersos. La intención es generar acciones en colectivo que puedan dar solución a problemáticas que afectan directamente a la población joven y el arte ha sido la mejor excusa para desarrollar este propósito.
Además, la identidad cultural como principio de transformación, en el que se consolidan subjetividades, lenguajes, intereses colectivos y modos de entender lo social y el territorio desde una misma visión, es asumido por el colectivo desde la música como punto de partida de expresiones artísticas propias de su territorio “el sur”, desde el festival del hip-hop que les permitió mostrarse a los suyos como agentes de cambio y resistentes a la estigmatización que se ha generado hacia los jóvenes de estas localidades ya mencionadas.
Si, ha habido cosas negativas, pero aun así las hemos solucionado, cosas negativas como cuando queremos brindar un taller en un barrio o en una comuna, nos dirigimos al presidente de esa junta de acción comunal y a veces nos cierran las puertas, por lo mismo porque piensan que somos drogadictos… entonces son esas pequeñeces, pero nosotros no le damos cobertura a esas cosas y buscamos otra parte donde hacemos mejores cosas (Entrevista a un integrante de la organización).
La construcción colectiva de subjetividades y la adherencia individual que producen referencias específicas de los grupos juveniles, son entendidas como la construcción de una identidad cultural, en la que según Flores19 citando a Brunet refiere que “Se percibe el territorio construido como un espacio de relaciones sociales, donde existe un sentimiento de pertenencia de los actores locales respecto a la identidad construida y asociada al espacio de acción colectiva y de apropiación”. En el caso de LEB, se ha consolidado una identidad en torno al grafiti, hip-hop y a lo que ellos denominan cultura urbana, cuentan con su propio estudio en el que producen sus proyectos artísticos y el de todos los que hacen parte del grupo, es de aclarar que no cualquiera puede ser parte del denominado grupo elite, para llevar este título se debe tener una historia y un trabajo importante con el grupo.
Los jóvenes actualmente se han interesado aún más por las dinámicas sociales que ocurren a su alrededor, sobre todo por aquellas en las que pueden ser partícipes o incluso actores de cambio desde su rol como grupos urbanos; es el caso de LEB que como colectivo juvenil tomaron la iniciativa de generar un cambio importante en su comunidad usando como herramienta esencial el arte.
Hoy en día, la cultura promueve procesos de pensamiento diferentes, particularmente, la cultura urbana emerge hacia un nuevo paradigma de transformación en las sociedades, teniendo como base las comunidades más jóvenes, quienes por medio de la creatividad y habilidades determinan desarrollo social e inclusión en un territorio. Estas dinámicas han generado la ampliación de fronteras más allá de los límites geográficos, proponen territorios culturales a partir de nuevas narrativas y visiones alternativas para contextos estigmatizados2.
En este punto, la participación nace como un instrumento de desarrollo fundamental que promueve en sí misma acciones transformadoras, de empoderamiento e igualdad, que permite alcanzar procesos de convivencia, ciudadanía e inclusión social; y sumado a ellos, el arte fortalece estos procesos como herramienta transformadora de pensamiento y racionalidades sociales que facilitan el constructo de identidad cultural y la interacción entre sujetos que habitan y dan sentido a un territorio4. Por lo anterior, se resalta la labor que realiza LEB, dando participación y visibilizando a los jóvenes de comunidades vulnerables como actores principales de cambio.
Además de los procesos de participación, son las escuelas de arte y sus semilleros algunas de las estrategias utilizadas para los procesos de trasformación social por parte del colectivo LEB, jóvenes que buscan generar cambios positivos en la comunidad, por medio del empoderamiento, formación y profesionalización en temas artísticos, proponiendo a su vez un proyecto de vida para la comunidad con la que trabajan.
Experiencias similares han tenido lugar en la fundación
“El Comercio” de Ecuador, con el programa
ARTeducarte que se dedica a incentivar la creatividad y expresión a través de procesos artísticos en niños y niñas que se encuentran en condiciones desfavorables20. O el grupo de teatro comunitario de Matemurga de Villa Crespo, Argentina, que tiene la convicción de fomentar la creatividad de sus participantes desde una práctica inclusiva en el territorio21.
En Colombia también se evidencian diferentes estrategias artísticas que promueven alternativas de vida similares a la del colectivo ibaguereño. Medellín particularmente presenta un número considerable de organizaciones juveniles que desarrollan procesos creativos a partir de elementos culturales22 y además promueven la equidad de género; una experiencia significativa en esta misma ciudad es la de un grupo de mujeres que se dedica a la práctica del hip hop como un medio que permite ampliar sus perspectivas de vida desde el arte, la resistencia cultural y la construcción de una identidad colectiva23.
Por otro lado, las condiciones de vulnerabilidad y problemáticas sociales que rodean el origen del colectivo definen aspectos muy puntuales descritos desde la teoría de los sistemas de Bertalanffy10, basado en que el desequilibrio del sistema, en este caso las dinámicas violentas que se estaban presentando, puede generar nuevos procesos que suplan las necesidades de los miembros del grupo, o denominado subsistema. En el caso de LEB, que, al estar inmersos en un contexto con pocas posibilidades, logran una identificación por su territorio desarrollando un nuevo “subsistema” que está determinado por la cultura urbana, como alternativa para cambiar las condiciones de vida que socialmente se les imponían.
El mencionado subsistema, tiene lugar las comunas del sur de la ciudad de Ibagué que es el territorio en donde se inicia esta idea de transformación, esta comunidad cuenta con una cultura e historia, que proporciona al grupo criterios de identificación por lo propio; así mismo, este colectivo se ha enfocado principalmente por visibilizar a su lugar de origen como una comunidad pionera en temas de cultura urbana. En este sentido, la conceptualización de la palabra “territorio” se refiere a la cultura, a las memorias relatadas por una comunidad, a sus muertos, a la construcción de pensamientos y todo lo que implica el simbolismo de habitar una tierra1.
Finalmente, se encuentra que la organización ha planteado la construcción de un tejido social, movido por la creatividad y el pensamiento ciudadano para hacer frente a las situaciones de su entorno; desarrollando propuestas que se puedan implementar en zonas de exclusión, todo con el fin de formar nuevas geografías sociales. Como refiere Molano6, las propuestas de tejido social destacan la participación de sus actores y les facilita hacerse visibles en un contexto cultural, social y hasta político.
Se logra establecer que la esencia de las acciones desarrolladas por la organización LEB como principal estrategia de transformación social son el arte, representado en el grafiti, la producción musical y el baile, entre otras expresiones artísticas que actualmente se practican y se enseñan al interior de la organización. Este grupo de jóvenes por medio de las escuelas de arte que han implementado en el sur de la ciudad, comparten con la comunidad, todo lo relacionado con manifestaciones culturales, además de incluir en sus procesos un mensaje de no violencia, no a las drogas y no a las demás problemáticas sociales de las que son parte los jóvenes hoy en día. Teniendo en cuenta la experiencia de LEB, se puede determinar que la trasformación social se da por medio de diferentes estrategias como:
Identidad cultural, se establecen procesos de identificación por medio del arte y pertenencia a un grupo.
Participación, se relaciona con el empoderamiento y liderazgo para los jóvenes otorgándoles la posibilidad de ser agentes activos con voz y voto dentro del grupo y en sus comunidades.
Formación, se promueve la educación formal y no formal a través de las escuelas y semilleros.
Construcción de territorio, por medio de la visibilización y reconocimiento del contexto social, político y cultural.
Tejido social, generando alternativas de inclusión y construcción de ciudadanía.
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